Una de las principales amenazas para nuestro bienestar diario es el temido estrés. Insomnio, nerviosismo, trastornos en los ritmos del sueño, cansancio y problemas de alimentación son algunos de los signos que hacen saltar las alarmas y nos avisan de que necesitamos ayuda psicológica para poder manejarlo.
¿Qué es el estrés?
El estrés se refiere a una activación de nuestro sistema nervioso simpático (el que nos mantiene alerta, moviéndonos y realizando actividades durante el día). En sí mismo no es un problema. Se convierte en un problema cuando esta activación es continuada y prácticamente todos los días sentimos una alteración de nuestra vida diaria que nos desborda.
Existen muchos factores que pueden generarnos estrés. Todo aquello que pueda suponer un peligro para nuestro bienestar: exámenes, una ruptura, problemas laborales, discusiones, y un largo etcétera.
6 pasos para aliviar el estrés
Estar estresado es un mecanismo natural que usan nuestros cuerpos para responder a las situaciones del entorno en que vivimos, por lo que no se puede eliminar, pero sí se puede aprender a gestionar para que no limite nuestra vida. A continuación, te dejamos 6 tips que te ayudarán a mejorar tu relación con el estrés:
- Identifica la situación que lo origina, por ejemplo, un exceso de demanda en el trabajo.
- Localiza los pensamientos que te produce la situación, por ejemplo “no puedo soportar esta carga de trabajo, no llego a tiempo, va a acabar conmigo…etc”
- Pon nombre a las emociones que te generan estos pensamientos, por ejemplo, desesperanza, tristeza, angustia…etc.
- Pregúntate si esos pensamientos obedecen a la realidad o están distorsionados, por ejemplo: Realmente ¿no puedo soportarlo? ¿en qué me baso?
- Crea pensamientos alternativos para cada uno y atrévete para ponerlos en práctica
- Busca conductas alternativas y maneras distintas de manejar las situaciones problema
La solución para el estrés es aprender a gestionar nuestras problemáticas cotidianas de manera que vivamos más conscientes y resolvamos con calma las situaciones que vivimos. Aprender herramientas que nos permitan enfrentarnos a aquello que está suponiendo un peligro para nuestro bienestar actual, y gestionar el tiempo que tenemos de una manera diferente.
Las red flags que te avisan del estrés
Los síntomas asociados a la ansiedad suelen ser los más habituales ante el estrés: te falta el aire, sientes que no puedes parar, pensamientos que marchan a toda velocidad, estómago revuelto, tensión en la mandíbula, alteraciones en el sueño… Pero pueden aparecer otros más relacionados con problemas de salud específicos: picores, diarreas o estreñimiento, alteraciones en la menstruación, dolor muscular, entre otros.
Cualquier persona, desde un bebé hasta una persona mayor, y con cualquier tipo de diversidad puede sentir estrés. Esto se produce en cualquier etapa vital porque se trata de un mecanismo de supervivencia del cuerpo ante posibles riesgos.
Más que una situación concreta, el estrés suele aparecer en épocas de muchos cambios vitales: momentos en que nos estamos jugando un ascenso o el avance en los estudios, cuando se juntan diferentes problemas, cambios de vivienda…
DIFERENCIA ENTRE ESTRÉS Y ANSIEDAD
EFECTOS DEL ESTRÉS EN LA MENTE
Listado de preguntas más frecuentes relacionadas con esta patología. (LAS CONTESTAMOS EN TRES LINEAS APROX)
- ¿Qué es el estrés?
- ¿Es normal tener estrés?
- ¿Se puede eliminar el estrés?
- ¿El estrés puede tener consecuencias negativas para mi salud?
¿Se puede sufrir estrés en la infancia?
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